MADRES EMPRENDEDORAS: IMPULSORAS DE LA ECONOMÍA PERUANA

MADRES EMPRENDEDORAS: IMPULSORAS DE LA ECONOMÍA PERUANA

En Perú, casi la mitad de las madres, específicamente el 47.7%, se desempeñan como trabajadoras independientes, revela el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Esta cifra refleja el notable número de madres peruanas que participan en emprendimientos, lo que les proporciona independencia económica, estabilidad para sus hogares y contribuye de manera significativa a dinamizar la economía nacional como empresarias.

Según Julio Brayan Saldaña Narro, director de la Carrera de Administración de Empresas de la Universidad Autónoma del Perú, las madres emprendedoras aportan una valiosa perspectiva al mundo empresarial. Su creatividad en la toma de decisiones y su diversificación en sectores clave constituyen elementos distintivos que impulsan la innovación y el desarrollo económico.

Este fenómeno, señala el especialista, es un reflejo de la transformación cultural y social en la que las mujeres desafían los roles tradicionales. De hecho, un 68% de las mujeres en Perú están económicamente activas según el INEI. Saldaña destaca que el éxito de las madres emprendedoras no solo tiene un impacto económico, sino también un valor social al empoderar a otras mujeres y desafiar estereotipos.

En el ámbito empresarial, las madres emprendedoras peruanas introducen nuevos productos e ideas en el mercado, fomentando así la innovación y la diversidad en diversos sectores. Este aporte fortalece la posición del país para enfrentar desafíos económicos y seguir generando oportunidades de crecimiento.

Además, las empresas dirigidas por madres están estrechamente vinculadas a sus comunidades locales. Según el INEI, el 80.2% de las madres están involucradas en micro o pequeñas empresas en Perú. Estos negocios no solo contratan a personas de la comunidad local, sino que también estimulan la actividad empresarial y promueven el desarrollo económico en esas áreas.

A pesar de estos avances, las madres emprendedoras aún enfrentan desafíos, como equilibrar las responsabilidades familiares con las demandas de liderar un negocio. Superar estas barreras requiere un enfoque integral que aborde tanto las necesidades individuales de las madres emprendedoras como los factores estructurales que contribuyen a su marginación económica y social.