FUNDO PAMPAMAYO: EMPRENDIMIENTO FAMILIAR QUE REVOLUCIONA LA CRIANZA DE GALLINAS PONEDORAS

En el corazón de la Comunidad Campesina de San José de Baños, en el distrito de Atavillos Alto, provincia de Huaral, se encuentra el Fundo Pampamayo. Este negocio, dedicado a la cría de gallinas ponedoras, es mucho más que un emprendimiento familiar; es el fruto del esfuerzo, la perseverancia y el compromiso con el medio ambiente y el bienestar animal de la familia Cañari-Casaño.

Fundado por los 10 hermanos de la familia Cañari-Casaño, el Fundo Pampamayo ha pasado por momentos difíciles y desafiantes en su camino hacia el éxito. Inicialmente incursionaron en la piscicultura de truchas, pero tras enfrentar dificultades financieras y personales, decidieron buscar nuevas oportunidades de negocio.

La trágica pérdida de su madre, Florencia Casaño, quien siempre fue un motor de inspiración para la familia, marcó un punto de inflexión. Con el deseo de honrar su legado emprendedor, los hermanos se unieron para invertir en un nuevo proyecto: la crianza de gallinas ponedoras.

Guiados por la visión de crear un negocio sostenible y comprometido con el bienestar animal, la familia Cañari-Casaño estableció un modelo de crianza de gallinas al libre pastoreo, también conocido como "gallinas felices". Este enfoque no solo garantiza el bienestar de las aves, sino que también produce huevos de alta calidad y valor nutricional.

A pesar de los desafíos iniciales y los errores en la gestión financiera, la familia perseveró. Con la orientación de expertos veterinarios y una firme determinación, lograron consolidar su negocio. Actualmente, los huevos Pampamayo son reconocidos por su calidad y sabor, siendo demandados por prestigiosos restaurantes y marcas.

El éxito de Fundo Pampamayo no solo radica en la calidad de sus productos, sino también en su compromiso con la innovación y la mejora continua. Con planes de expansión y el objetivo de satisfacer la creciente demanda de huevos, la familia se prepara para aumentar su producción y extender sus operaciones en el valle de Pampamayo.

Este modelo de negocio les ha permitido tener como clientes a grandes restaurantes y marcas de la talla de Astrid&Gastón, Panchita, La Mar, Agroferias Campesinas, UPC, Armónica Café, entre otros.