AREQUIPA ES SEDE DEL CADE EJECUTIVOS DESPUÉS DE 12 AÑOS: UN IMPULSO A LA RECONSTRUCCIÓN ECONÓMICA DEL PERÚ

27/11/2024
Arequipa se ha convertido en el epicentro empresarial del país al albergar, después de 12 años, la 62ª edición del CADE Ejecutivos. Este evento emblemático que se está realizando del 26 al 28 de noviembre, reúne a líderes empresariales y políticos bajo el lema "De la degradación a la reconstrucción de nuestro futuro", con el objetivo de trazar estrategias que impulsen el desarrollo del Perú.
El potencial económico del país fue destacado por la Corporación Financiera Internacional (IFC), brazo financiero del Banco Mundial. Según Álvaro Quijandría Fernández, consultor de la IFC, el Perú tiene ventajas competitivas únicas en minería, agroindustria y sostenibilidad, que pueden marcar la diferencia en la región. Sin embargo, insistió en la necesidad de reformas, especialmente en infraestructura, para cerrar brechas de conectividad y reducir costos logísticos.
Además de la infraestructura, Quijandría subrayó la importancia de las "reformas blandas", aquellas orientadas a potenciar la productividad del país. Estas iniciativas buscan fortalecer las capacidades económicas y empresariales necesarias para sostener el crecimiento a largo plazo, abriendo nuevas oportunidades para la inversión privada.
La reciente organización de la Cumbre APEC en el Perú también fue un hito destacado. Matilde Bordón, gerente de País para Perú, Ecuador y Bolivia del IFC, señaló que este evento posicionó al país entre las economías más relevantes del bloque Asia-Pacífico. Además, resaltó que el Perú tiene condiciones óptimas para atraer inversión privada, particularmente en sectores como la agroindustria, reconocido como uno de los de mayor potencial.
El Perú también presenta un panorama favorable en materia de recursos naturales y transición energética. Bordón destacó que el desarrollo de energías renovables fortalece la resiliencia económica frente al cambio climático. “Junto al sector privado, el IFC fomenta una economía más inclusiva y sostenible”, manifestó.
A pesar del optimismo, los desafíos persisten. El Banco Mundial proyecta un crecimiento económico del 3.1% para este año, en línea con otras estimaciones. Sin embargo, el reto principal radica en alcanzar niveles de crecimiento del 5% o 6%, indispensables para una reducción significativa de la pobreza.
“Este salto requiere reformas estructurales y políticas que fortalezcan la confianza en el país”, comentó Quijandría. Bordón añadió que el entorno político también juega un papel crucial en la implementación de estas transformaciones necesarias para alcanzar un desarrollo más sostenible.
Como muestra de su confianza en el Perú, el IFC anunció la reapertura de su oficina en el país. Este movimiento estratégico busca incrementar su presencia local y fomentar la participación del sector privado en los desafíos económicos y sociales que enfrenta la nación.
Entre las prioridades del IFC se encuentran la mejora de la productividad y la inclusión económica. Estas áreas son esenciales para consolidar el desarrollo del Perú, especialmente en un contexto en el que la economía enfrenta presiones externas e internas.
La realización del CADE Ejecutivos en Arequipa simboliza un punto de inflexión para reflexionar y construir un futuro económico sólido, reafirmando el compromiso de todos los sectores con la reconstrucción y el progreso del país.